Ocho consejos para aprovechar la asesoría

Ocho consejos para aprovechar la asesoría

La ayuda externa para las empresas representa una oportunidad de crecimiento, por dos importantes razones: Le ahorra tiempo y dinero.
Al contratar un equipo de expertos para que busquen e implementen las soluciones más adecuadas para su empresa.

Difícilmente una compañía podría investigar cuáles son las ideas y métodos mas adecuados para resolver problemas que se relacionan con el entorno económico, social y político de una manera rápida y económica.

Sin embargo usted debe saber cómo aprovechar al máximo esta asesoría.

1- Al principio no involucre a los directivos de su empresa en la consultoría, ni permita que se enfrenten o cuestionen al consultor, el ambiente debe ser de cooperación.

2- Explique a su personal que los consultores son ayuda externa; no desplazarán a nadie, al contrario; apoyarán el desempeño de la empresa.

3- Pida resultados claros al asesor para saber dónde estarán los resultados.

4- Pida a su asesor un plan donde, una parte de sus honorarios sean sobre resultados (hasta 25%) si no acepta, desconfíe del asesor.

5- Pida que en el contrato de prestación de servicios y los honorarios tengan un costo fijo y se especifiquen los costos indirectos.

6- Dedique tiempo para escuchar y apoyar al consultor, facilitándole su trabajo.

7- Es conveniente que su personal apoye al asesor, pero que no le haga el trabajo.

8- Procure no pagar el total de la asesoría hasta haber analizado la información.

La consultaría debe representar un reto para la empresa y una oportunidad de progreso para sus colaboradores.

Reúnase con su personal para hacer cuestionamientos constructivos.

Cuando su consultor presenta evasivas, algo anda mal.

Recuerde que el consultor no tiene todo el conocimiento, lo debe investigar.

El único responsable de elegir la consultoría es usted y también es su responsabilidad el analizar la información, si deja solo al consultor hará lo que a su juicio crea conveniente.

Una buena consultoría, puede cambiar su paradigma de hacer negocios y proyectar a su producto o servicio a las grandes ligas empresariales.