El que no entiende, no vende

  Mientras las redes sociales van formando parte de los hábitos de toda persona con posibilidad de acceso a un ordenador, hacen a la vez reflexionar a los dueños y gerentes, mucho más que el esfuerzo denodado de los consultores de negocios. Las empresas se preocupan por la forma en que participan en la web y hasta los más lentos ya vislumbran que su falta de acción, puede acarrear problemas futurosante el fortalecimiento de sus competidores.

El primer paso que damos, es siempre la revisión del propio sitio de la empresa. Sin embargo, con renovar la estética de la web no alcanza. En nuestra web, y sobre todo en la home, se debería apreciar claramente cuál es el producto estrella de la empresa, la línea de servicios con mayor participación o la solución que impondremos al mercado. Ese espacio debe representar fielmente la estrategia comercial de la empresa.

Es normal ver sitios que desperdician toda la home hablando de sus profesionales, la misión o cómo se fundó. Es decir, cosas que a ningún comprador le interesan demasiado. Sin embargo, a sus productos le reservan un espacio tan pequeño como el de la pestaña “Soluciones” en la barra superior. Para no caer en estos errores, dejamos a continuación algunas ideas que pueden ayudarnos a mejorar comercialmente la página de inicio.

1. Lo que más vende, primeroLa pirámide invertida es la regla que tienen los periodistas para escribir noticias e indica que cuando uno escribe un artículo, lo más importante se ubica siempre arriba. ¿Qué significa arriba en una web y en términos comerciales? El espacio más visible y grande de la home. ¿Y qué es ‘lo más importante’? El producto o servicio que más vendo, obviamente. 

2. Lo que más vende, en todos ladosExiste una regla mnemotécnica muy practicada: repetir, repetir y repetir. Así aprendimos las tablas, por ejemplo. En comunicación comercial también se aplica. El producto/servicio estrella, debe aparecer en cada una de las secciones de la home. Sí, en todas: menús superiores, imagen central, módulos y menús inferiores. 

3. Si quiero vender, me preparo para venderCuando quiero vender en el mundo real preparo mi carpeta, la guardo en un maletín, golpeo una puerta y pongo mi mejor sonrisa (¡suena a prehistórico!). En la web, nuestra mejor sonrisa se llama Landing Page, o sea, una página a la que debemos hacer llegar todos los requerimientos sobre el producto o servicio y quecontiene un llamado a la acción para que el posible cliente avance en el proceso de compra. Esto es esencial. Si no tienes landing page, tu web no vende.

4. Eficiencia en la velocidadTodos modificamos nuestros hábitos. Hace diez años era mejor vender una película si sus protagonistas fumaban. Hoy perderían audiencia. Nuestro mercado consume por internet (¡nosotros somos nuestro mercado!) y dedica menos de dos minutosen promedio a explorar una web que le interesa. ¿Se entiende? Una web que SÍ le interesa. Así que prepara tu web para que en la mitad de ese tiempo pueda despertar algún interés. No escribas demasiado, utiliza tips, botones e invita a la acción. De lo contrario, todo el esfuerzo por llevar público a tu sitio se perderá como agua en la mano. 

No escribo más, porque según esta última regla, he perdido la atención del lector hace exactamente quince segundos.