Cómo cautivar a los mejores empleados para evitar la fuga de talento Guardar nota

"Si no seducimos a nuestros principales valores en la empresa, terminarán por dejarnos, por lo que a la larga, será peor", afirma Jorge Salinas, socio director de Atesora, una consultora especializada en el acompañamiento a organizaciones y profesionales en situaciones de cambio.

En esta línea, Javier Tovar, consultor talent mangement de MOA BPI Group, señala al diario Expansión que no son pocos los empleados que no dejan sus puestos porque temen abordar un cambio profesional haciendo suyo el dicho: Más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer.

En el actual mercado de trabajo español, "el conformismo es ahora mayor que nunca, incluso en condiciones peores", asegura Tovar.

Y es que las empresas suelen preocuparse por captar al mejor talento pero no por mantenerlo.

Algo falla, y ese algo, entre otras cuestiones, suele ser la comunicación. "A veces se relega a una intranet o a una cartelera de anuncios", explica a Expansión Enrique Alcat, director del programa superior en gestión empresarial y dirección de comunicación del IE.

Prestar la debida atención a las personas conociendo sus inquietudes, escuchándolas y haciéndolas partícipes de los logros y de los retos, es fundamental para la buena marcha de la organización.

Por un lado, porque la productividad de los empleados aumenta; por otro, porque influye en la imagen interna y externa.

"Todo lo que se dice dentro, sale fuera; así que el principal objetivo de la comunicación es que los empleados sepan en qué empresa trabajan, y no se tengan que enterar por terceros de lo que ocurre. Todo empleado es, lo quiera o no, portavoz de su organización", comenta Alcat a Expansión.

Según Atesora, "todo directivo es responsable de generar contextos en los que se den las tres "B" de la motivación (Be (ser), belong (pertenecer) y become (transformarse), en los cuales, las personas se sientan reconocidas por aquello que son y aquello que hacen, sientan que están contribuyendo a un proyecto y crean en sus posibilidades de seguir creciendo personal y profesionalmente dentro de la organización".

Pero, para que una empresa llegue a cumplir con las tres "B", Tovar aconseja que, tanto directivos como el departamento de Recursos Humanos, "apuesten por el desarrollo y evite el estancamiento y acomodamiento de los empleados, demostrando que se cuenta con las personas y su desarrollo aprovechando al máximo las oportunidades internas; den facilidades para la conciliación laboral y personal; reconozcan los logros y éxitos individuales; refuercen su marca, consiguiendo que la empresa sea un lugar atractivo para trabajar; refuercen la comunicación interna y se fomente el buen clima laboral".